El conflicto entre Policía Local y Ayuntamiento de Badajoz sigue repercutiendo al deporte pacense. Si el pasado 28 de enero la ausencia de agentes obligaba a suspender la 39ª edición de la Vuelta al Baluarte, los perjudicados en está ocasión son los participantes del 31º Maratón y 9º Medio Maratón.
De nuevo, el hecho de no estar garantizada la presencia efectiva de un número mínimo de agentes para la organización de la prueba ha obligado al consistorio a suspender la celebración de una prueba histórica y de una amplia participación y seguimiento.
La presentación de ambas pruebas tuvo lugar este miércoles en las Casas Consistoriales. Durante el acto, Ignacio Gragera confirmó que el dispositivo policial estaba organizado y nombrado y que se confiaba desde el ayuntamiento en que la planificación se cumpliera.
Según argumenta el consistorio pacense en el comunicado donde se anuncia la suspensión, las bajas comunicadas desde la celebración de la rueda de prensa «provocan que el dispositivo no cuente con el mínimo de agentes disponibles».
También se expresa desde el ayuntamiento que, dada la trascendencia que tiene la prueba para la región en general y la ciudad en particular, ha incluido en su programación de eventos anual la posibilidad de acudir de forma voluntaria y remunerada a cubrir la prueba, «sin que hasta la fecha se hayan producido altas voluntarias para la misma».
En caso de que la situación variara en las próximas horas y se pudiera contar con el número de agentes suficientes para completar el dispositivo, el consistorio pacense podría reconsiderar la decisión de suspender la prueba.
«La organización lamenta profundamente esta situación que afecta a servicios municipales, deportistas, patrocinadores y colaboradores que han trabajado desde hace meses para hacer posible este evento», afirman desde la organización municipal.
Por último, el escrito publicado por el consistorio afirma que próximamente se informará a los participantes sobre el proceso de devolución del importe de la inscripción.
