Se cumplió el tópico. Entrenador nuevo, victoria segura. El Badajoz vence a Unionistas de Salamanca en un encuentro vibrante en el que los pacenses remontaron el tanto inicial de Losada en el minuto 11 de partido.
Un tanto de Gorka Santamaría en el 36 y otro de Calderón en el 81 dieron tres puntos vitales al Badajoz de cara a sus aspiraciones de permanencia, en un choque en el que el equipo pacense fue valiente desde el primer minuto, asumió riesgos y acabó llevándose el duelo.
La primera pincelada de Tenorio se pudo ver en el sistema. El Badajoz inicio con un 4-1-4-1 en ataque que se convertía en 4-4-2 cuando el equipo replegaba. La defensa de cinco hombres, tan cuestionada por el aficionado en las últimas semanas, desapareció para dejar paso a un Más- Mariano-Borja-Cordero.
Mancuso se situó como hombre ancla por delante de la defensa, acompañado de Zelu y Alfaro, que se alternaban en la banda en fase defensiva. En la parte ofensiva, Gorka, Soto y Calderón se repartían los espacios con el extremo de Almansa pegado a la cal de la banda derecha para buscar centros laterales desde ese perfil.
Desde los primeros minutos se vio a un Badajoz con vocación más ofensiva pero que se partía con facilidad. El equipo de Tenorio tenía el balón y acumulaba mucha gente por delante de la línea que marcaba el esférico, pero las pérdidas en contra generaban problemas en transición.
Tras el arreón inicial del Badajoz, Unionistas consiguió hacerse con el balón y durante ese tramo logró hacer daño a los blanquinegros. En el minuto 11, el cuadro charro conseguía juntar una serie de pases en el perfil izquierdo para atraer la presión blanquinegra. Héctor lograba recibir entre líneas y mandaba un envió a Mario Losada a la espalda de la defensa que lo dejaba solo ante Kike Royo.
El delantero de Unionistas controlaba con el pecho y tras un bote mandaba un envío cruzado que superaba al meta riojano. Unionistas golpeaba primero en el partido y enmudecía al Nuevo Vivero. El Badajoz nuevamente se ponía por detrás en el marcador en los primeros minutos del partido ante la incertidumbre de su parroquia.
No se volvió loco el equipo de David Tenorio y continuó ejecutando el plan inicial de partido. Los riesgos continuaban siendo latentes y prueba de ello fue la ocasión de la que dispuso De la Nava en el 15 de partido, mandando fuera por muy poco una ocasión tras una gran jugada individual.
A pesar de las ocasiones en contra, el Badajoz siguió insistiendo en tener presencia ofensiva. El primer acercamiento con peligro estuvo en las botas de Gorka, que remataba forzado un centro de Calderón que se marchaba a córner
El propio Calderón iba a tener en sus botas un nuevo acercamiento peligroso después de conectar un zurdazo desde el pico del área que se marchaba fuera por poca distancia. El Badajoz comenzaba a encontrar las sensaciones necesarias para empatar el partido.
Dicho y hecho. El partido pasaba la media hora cuando nuevamente Calderón se proyectaba por banda derecha tras un envío en largo de Mariano Gómez. El de Almansa controlaba sin oposición, levantaba la cabeza y divisaba la cabeza de Gorka Santamaría en el segundo palo.
El centro, que llevaba música, encontraba la frente del killer vasco, que hacia el empate después de cambiar la trayectoria del cuero con su testarazo. El Cívitas Nuevo Vivero estallaba de júbilo y soltaba el aire acumulado por la tensión generada durante la primera mitad.
El Badajoz había conseguido cumplir uno de los objetivos principales durante la primera mitad, marcharse a vestuarios con el partido empatado. Los de David Tenorio lograron reponerse del mazazo del primer tanto de Unionistas y de las ocasiones que dispuso el cuadro de Rafa Ponz.
Tras el descanso, el técnico nazarí no quiso correr más riesgos de los necesarios y dio entrada a Mati Pérez Acuña en detrimento de José Más, que había visto la cartulina amarilla en el primer minuto de juego.
La conexión Gorka-Calderón iba a seguir siendo un quebradero de cabeza para la defensa de Unionistas. El extremo blanquinegro fue un puñal durante todo el encuentro, generando ventajas para sus compañeros y metiendo centros al área que provocaban la indecisión de zagueros y meta rivales.
En un nuevo envío desde la banda derecha, Gorka estuvo cerca de hacer su doblete particular de no ser porque su cabezazo no cogió la dirección esperada y se marchó fuera.
Con el paso de los minutos, el Badajoz crecía en el partido y no especulaba esfuerzos para tratar de lograr la victoria. Pero Unionistas no había dicho su última palabra en el encuentro. Pasada por poco la hora de partido, llegaría la polémica al Nuevo Vivero.
Beneit se internaba en el área y, cuando Acuña recibía la ayuda de Calderón, el futbolista de Unionistas ponía un centro raso al corazón del área que tocaba ligeramente Héctor. El cuero salía mordido y le llegaba franco a Chapela que introducía el balón en las redes de Kike Royo.
Rápidamente, el juez de línea levantaba la bandera y anulaba el tanto ante las protestas de los futbolistas charros. Como se vería minutos después en imágenes de la retransmisión, Chapela se encontraba en posición legal cuando conectaba el remate y, por tanto, el gol no debió ser anulado.
Con el susto aún en el cuerpo, Tenorio dio entrada a Palma por Soto con la intención de equilibrar más a su equipo. El técnico granadino quiso minimizar los riesgos y se apoyó en un 4-2-3-1 para disputar los últimos 25 minutos de partido.
Le sentó bien el cambio al Badajoz, que creció en el encuentro instalando el bloque en campo rival. Tenorio culminó sus ajustes dando entrada a Ferrón y Edu Sánchez, que volvía al verde tras un largo parón causado por un problema muscular.
El joven lateral del Badajoz volvió a demostrar porqué su equipo le ha echado tanto de menos durante este tiempo. Su entrada dio más amplitud al cuadro pacense por banda izquierda y supuso un complemento perfecto para Adilson en las jugadas ofensivas.
Precisamente por el costado izquierdo se comenzaría a fraguar la remontada del Badajoz. El partido entraba en su recta final cuando Adilson encaraba a su par pisando área rival. El extremo luso quiso cambiar el juego de lado pero su pase tocó en un rival y el balón cayó en las botas de Edu Sánchez.
El lateral blanquinegro amagaba en primer lugar y, una vez generado el hueco, ponía un centro raso al corazón del área. Un nuevo rechace por parte de la zaga salmantina hizo que el esférico recayera en los pies de Alfaro, que ponía un centro templado desde el lateral del área. Calderón, que se había quedado como referencia ofensiva, cazaba el envío de su compañero y con un remate acrobático de exterior hacía el 2-1.
Si con el empate el Vivero fue un clamor, con el segundo tanto se desató la locura. No solo en las gradas, el banquillo blanquinegro invadió el campo para celebrar el tanto de Calderón, conscientes de la importancia de obtener los tres puntos en este encuentro.
Tras adelantarse, el Badajoz no se puso nervioso y dominó los tiempos del partido, esperando a que pasaran los minutos para poder certificar una nueva victoria. Después de que se cumplieran los cuatro minutos de añadido, el colegiado decretó el final de un encuentro cargado de emociones y que supuso la primera victoria en más de dos meses.
Carlos Calderón se erigió sin ninguna duda como el mejor jugador del partido. Asistió en el primer gol, anotó el segundo y fue el futbolista que más acciones ofensivas protagonizó en favor de su equipo.
El Badajoz sale del descenso con esta victoria y se sitúa en la decimocuarta posición de la tabla a dos puntos de los puestos peligrosos. La próxima semana, el cuadro dirigido por David Tenorio viajará hasta Talavera para afrontar un nuevo duelo vital en su lucha por la permanencia ante un rival directo.