Pequeño pero Gastón
Y al fin llegó el primer triunfo. El Santa Teresa Badajoz disfrutó el domingo del dulce sabor que anhelaba desde el inicio liguero allá por la primera semana de septiembre. Como pasara años atrás, de nuevo tuvo que ser en Sevilla, y eso que las hispalenses han cuajado un inicio de competición bastante aseado. Llegó en el campo principal de uno de los mejores recintos deportivos de todo el país. De los terrenos en los que habitualmente se juega la Liga Iberdrola, seguramente sea el mejor de todos. La clave del triunfo quizás sea que se buscaba con pasión, pero no con ansiedad.
Lo mejor no son los tres puntos, que también, sino la forma en la que se consiguió. Cada vez es más difícil lograr imponerse fuera de casa, sea quien sea el rival, y a eso hay que añadirle el plus de la remontada. Y todo en 45 minutos. Eso sí, para nada pilló de sorpresa, puesto que las rojiblancas ya habían merecido la victoria en la mayoría de las jornadas anteriores. El equipo también se demostró a sí mismo que sabe aprovechar el balón parado en ataque (así llegó el tanto del empate), con Estefa por supuesto tirando del carro.
La capitana ha marcado cinco de los siete goles que las pacenses han conseguido en estas primeras ocho jornadas de competición. Si continúa con estos números, nadie duda de que estaremos ante la mejor campaña histórica de la jugadora franquicia del equipo de Antúnez. Puede llegar perfectamente a su mejor marca. Hace dos años mantuvo al equipo en Primera con 17 goles. Antes de ayer, en la tradicional tertulia de los lunes de Onda Cero Badajoz, Santi Aguinaco pedía con total convencimiento la convocatoria de Estefa con la selección española absoluta. No es la única voz que lo reclama, ni tampoco hay nadie que se atreva ahora mismo a quitarles la razón.
Volviendo al equipo como colectivo, los tres puntos de Sevilla deben servir de acicate para las próximas semanas. Sería un grave error que este triunfo de mérito quedara simplemente en una anécdota. Debe ser el comienzo de una extraordinaria racha. El Santa Teresa lleva casi toda la campaña haciendo méritos para ir sumando de tres en tres en cada partido, pero ahora la felicidad por fin ya es completa. El Espanyol puede ser la siguiente víctima en un duelo que se presume realmente igualado. Los objetivos, como siempre, han llegado con trabajo.
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