El larguero de Álex Herrera fue la única ocasión de un partido eminentemente táctico y donde ambos conjuntos no asumieron riesgos
La copa del «Marrón» como así fue bautizada por Agustín Izquierdo vivió un nuevo episodio del que poco se puede contar. En un once en el que combinaba, titulares, no habituales, y el juvenil Zeus, se pudo ver un gran rigor defensivo y un trabajo colectivo muy importante. La nota negativa fue la escasa profundidad que mostró frente a un equipo aún más reservado si cabe.
El primer acto de partido careció de ocasiones de todo tipo. El Badajoz fue de menos a más en el control del partido, mientras que los lorquinos mantuvieron en todo momento la posesión de balón, aunque sin llegar a amenazar la portería de Nico Monclova.
Ya en la segunda parte, el Badajoz se estiró un poco más, y gozó de las únicas ocasiones del partido gracias a un remate desviado de José Ángel, y de un buen disparo desde el pico del área de Álex Herrera que fue repelido por la madera.
La nota negativa sin duda para ambos equipos fueron las lesiones de Javichu y Michael, que sufrieron una intrascendente acción en la línea de fondo del Lorca tras pelear un balón dividido y quedar ambos convalecientes.
La vuelta será el próximo miércoles, día 18 de enero, a las 20:45.
Esta es la valoración que hace Agustín Izquierdo sobre este encuentro