El equipo pacense fue derrotado en un partido muy igualado
El Mideba volvía a su cancha tras la última jornada de liga y la Copa del Rey. Lo hacía con Jorge Borba al frente del equipo, y ante un rival de importancia, el Getafe BSR. El equipo rojillo llegaba a Badajoz tercero en la clasificación liguera, justo por encima del Mideba, y con una plantilla corta por algunas ausencias. Todo presagiaba que sería un encuentro de esos que hacen afición, y los pronósticos se cumplieron, mucha igualdad en el marcador y una prórroga incluida, de la que ya no se recuerda cuando fue la última en los feudos pacenses.
El Mideba se mostró centrado en la pista desde los inicios, aunque los fallos en sus tiros le pesaron al final. Pese a que el juego desplegado recordó a aquel equipo que conquistara una Eurocopa allá por el año 2013, un último cuarto y prórroga nada afortunados para los pacenses provocó la derrota de estos, alejándose un poco más de la tercera plaza.
El partido empezó con ambos equipos respetándose, pendientes de manejar bien la pelota para no cometer fallos. Los pacenses tomaba la iniciativa en el marcador en los primeros minutos, con una buena defensa de su zona. El técnico madrileño solicitaba tiempo muerto al comprobar que su equipo no imprimía carácter. Sus jugadores respondieron con varios aciertos consecutivos que lograban acortar las diferencias. El equipo pacense cometía errores, sobre todo de cara al aro rival, lo que animaba al rival, que a solo un minuto para acabar el cuarto conseguía darle la vuelta al marcador 14-16.
El equipo local comenzó más fuerte y con más velocidad en el segundo cuarto, lo que complicaba el juego de Getafe. Estos defendían a toda la pista, ejerciendo una gran presión lo que obligaba a realizar mucho esfuerzo a los extremeños. Mucha intensidad y juego bonito por ambos bandos. Los extremeños se mostraban más seguros en la recta final, lo que le daba más opciones de tiro. A pesar de ello Getafe le seguía muy de cerca, llegando al descanso 28-27.
Tras el descanso la intensidad no disminuyó. Los extremeños estaban certeros en el tiro, y Getafe mostraba dificultades para poder lanzar con fiabilidad. El juego interior de los madrileños seguía siendo su arma más poderosa de la mano de Gholamazad. El Mideba mostraba su mejor cara con un juego de equipo que le permitía coger alas en el marcador para llegar al último tiempo 47-37.
El Getafe salió en el último tiempo a morder, presionando mucho y buscando las jugadas profundas. Mideba se desdibujaba sobre todo en ataque donde sus lanzamientos no tenían premio. Después de varios minutos con una leve ventaja para el equipo local, el equipo visitante conseguía el empate a 53 casi sobre la bocina.
En la prórroga, los visitantes parecían más seguros, o por lo menos más efectivos, consiguiendo ponerse por delante en el luminoso. La emoción se mantuvo hasta el final de la prórroga con un ajustado 62 – 63, que daba la victoria al equipo getafense y le permitía distanciarse de su más inmediato perseguidor.