Las de Juan Carlos Antúnez se proclaman campeonas de Liga, tras un brillante año, rubricado en La Rambla. Ali y Marisa hicieron los goles rojiblancos.
Cuando se llevaban haciendo las cosas con una eficiencia tan mayúscula desde el pasado mes de septiembre, y con muy pocos baches con los que se han tropezado en el camino, el triunfo es un camino que debe llegar casi de manera obligada.
Este es el sendero que ha decidido cruzar el Santa Teresa, un proyecto tan joven como ambicioso que se ha visto recompensado con un título liguero, cuya confirmación vino en el cordobés campo de La Rambla después de un partido más práctico que estético de las pacenses.
La primera media hora de partido fue de intercambio de dominio, aunque no de golpes, ya que escasamente se veían ocasiones en las porterías de uno y otro equipo. La iniciativa la llevaban las de Pedro Aljama, aunque sin saber siquiera como inquietar a una inédita Patri. Aunque la «X» era un resultado válido en la quiniela Santateresista, las de Antúnez no querían conformarse con el empate, y en el 36 de la primera mitad, cuando comenzaban a hacerse con el control del partido llegó el 0-1. Un centro desde la izquierda de Ali que se envenena y acaba alojándose en la puerta de las andaluzas. Este tanto sería muy psicológico para ambas escuadras, ya que espoleó a unas, y dejó muy tocada a otras.
Tras la reanudación, el Santa no tardó en matar el partido. Cuando en una contra de las pacenses, Estefa trataba de internarse en el área contraria, la defensa andaluza le frenó en seco. La capitana se dolía y tenía que marcharse fuera, pero dejaba la oportunidad a una especialista como Marisa para lanzar un golpe franco en una posición bastante buena. La central no falló, y el 0-2 subió en el minuto 53 en el marcador en medio del suspense y la polémica, ya que primero golpeó en el travesaño, y luego botó dentro de la portería de La Rambla. Unos dijeron que no entraron, pero el colegiado principal sí lo vio claro y decidió dar por bueno el segundo tanto del Santa Teresa.
Desde ahí hasta el final, las ocasiones se sucedieron por el bando principalmente visitante, pero el marcador ya no se movería. El ex-técnico del Flecha decidió dar entrada a jugadoras como Anais, Clara o Martita, para que todas tuvieran participación. Con el pitido final, el delirio se apoderó de la expedición pacense, y celebraron un título más que merecido sobre el césped de la Ciudad Deportiva de La Rambla.
El míster, Juan Carlos Antúnez declaró tras finalizar el partido que «Hay que sufrir para ganar. Nosotros esto lo vamos a celebrar y si llega el ascenso más aún». Por su parte, la capitana, Estefanía Lima apostilló que «Ha costado. Es un campo difícil y nos han podido los nervios. Al final se ha conseguido».
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