
La primera derrota del Badajoz en 2025 llegó en Llerena. El equipo pacense visitó el Fernando Robina con la opción de dormir líder pero un Llerenense superior acabó llevándose la victoria gracias a un gol de Álvaro Cordero.
Los de la Campiña Sur dominaron todas las fases del juego y consiguieron incomodar al Badajoz durante los 90 minutos. Además, los blanquinegros tuvieron que afrontar gran parte del segundo tiempo con un hombre menos debido a la expulsión de Fran Miranda.
Con la idea de tener más balón y mayor movilidad entre líneas, Luis Oliver Sierra volvió al 4-2-3-1. Una de las novedades estuvo en la línea defensiva, en la que Lobato salió de la partida como lateral izquierdo y Ginés formó pareja de centrales junto a Jesús Sánchez.
Fran Miranda y Gus Quezada ocuparon la sala de máquinas, custodiando a Santi Luque, Barba y Bermúdez, mientras que Álex Alegría ocupó la posición de delantero centro.
El encuentro comenzó con un Llerenense dominador. El conjunto que dirige Juan García fue a buscar al Badajoz con intensidad y logró que los pacenses no consiguiera sentirse cómodos sobre el artificial del Fernando Robina.
Los de la Campiña Sur obligaban a su rival a dirigir al cuero a los costados, donde conseguían imponerse en los duelos para recuperar el esférico y comenzar a jugar desde atrás.
En una de las pocas combinaciones que el Badajoz consiguió trenzar, Gus Quezada se desplegó por el costado izquierdo y llegó a pisar área, pero su golpeó no entrañó demasiada dificultad para César Llera.
El que si tuvo que emplearse a fondo fue Álex Quesada. El meta blanquinegro volvió a dejar una soberbia intervención en la que hizo gala de reflejos a un cabezazo de Álvaro Cordero a bocajarro.
Para tratar de liberarse del planteamiento pegajoso del Llerenense, el Badajoz hizo permutar a sus tres mediapuntas para tratar de generar desorden a la espalda de los centrocampistas del rival. Barba, Bermu y Santi Luque se iban alternando los puestos detrás de Alegría, pero no terminaban de imponerse con la suficiente soltura.
El primer golpe al partido se lo iban a asestar los de la Campiña. Álvaro Cordero aparecía al primera palo para rematar un centro desde la izquierda de Dani Martínez y batía a Quesada con un remate al primer toque.
El gol confirmaba la superioridad de un Llerenense que supo gestionar de manera adecuada los tiempos del encuentro durante la primera parte, en detrimento de un cuadro pacense que se vio superado.
Tras la inauguración del electrónico, el partido comenzó a calentarse y cada duelo se convertía en un enfrentamiento entre varios jugadores. Las revoluciones pasaron factura al Badajoz, que veía con desesperación como los minutos iban pasando sin que se jugará demasiado.
La recta final del primer tiempo fue el tramo en el que se pudieron ver los mejores minutos de los blanquinegros, que consiguieron por primera vez generar superioridades desde las bandas, lo que se tradujo en varios balones colgados al área que obligaron a meta y zagueros locales a emplearse a fondo para evitar el empate.
Ya en el segundo tiempo, la dinámica no cambió en exceso. El Llerenense continuó arrebatándole el cuero al Badajoz e incomodándole cada vez que los blanquinegros trataban de ejecutar su juego.
Todo se iba a complicar aún más para los intereses de la escuadra de Luis Oliver. En el minuto 56, el colegiado mostraba la segunda amarilla a Fran Mirada y dejaba al Badajoz con diez hombres.
A pesar de la inferioridad numérica, desde el banquillo Oliver quiso arriesgar e introdujo a David Grande y a Montori para tener mayor presencia ofensiva, pero las soluciones continuaron sin aparecer.
Con el paso de los minutos, el partido fue trabándose cada vez más. Cada duelo se convertía en un enfrentamiento que ralentizó el partido, haciendo que los minutos pasaran sin que ocurriera demasiado.
El Llerenense supo gestionar de manera adecuada los tiempos del partido y evitó que el Badajoz generara peligro, salvo acciones aisladas a balón parado que no terminaron de poner en riesgo el resultado.
El choque concluyó con un córner a favor de los blanquinegros al que subió a rematar Álex Quesada sin que la acción concluyera en remate a puerta.
Finalmente, el cuadro de la Campiña Sur se acabó llevando la victoria y provocó la segunda derrota del Badajoz en lo que va de temporada, apretando aún más la parte alta de la clasificación.
Tras cuatro encuentros consecutivos, el Badajoz regresará al Nuevo Vivero la próxima semana por primera vez en lo que va de 2025. Los hombres de Luis Oliver Sierra se enfrentarán al Diocesano en un nuevo duelo ante otro de los aspirantes al ascenso.