Tras mucho caminar por el desierto, el Badajoz ha encontrado un pequeño oasis. El conjunto blanquinegro venció 3-0 al Fuenlabrada en casa en una gran actuación colectiva que sirve a los hombres de Tenorio para meterse de lleno en la lucha por la permanencia.
La principal novedad en el once del técnico nazarí volvió a estar en la portería. Miguel Narváez repitió titularidad bajo palos tras debutar ante el Ceuta durante la pasada jornada. También se produjeron novedades en la defensa con la vuelta de Calderón al lateral derecho y la entrada de Cordero en el perfil zurdo junto a Juanmi García y Mariano.
Tenorio quiso blindar el centro del campo juntando a Buyla y Mancuso para darle libertada a Alfaro, que en muchos momentos del partido ejercía como mediapunta. En la parcela ofensiva, Adilson por la izquierda, Soto por la derecha y Gorka Santamaría en punta.
Aunque los primeros cinco minutos del encuentro fueron algo dubitativos por parte del Badajoz, el cuadro blanquinegro se quitó pronto los complejos y empezó a llegar con peligro a la meta de Craninx.
Antes de llegar al minuto diez, Gorka disponía de la primera acción peligrosa tras rematar un centro de Calderón desde la derecha. Un zaguero kiriko despejaba su lanzamiento y mandaba el cuero a córner.
Escasos tres minutos después sería Buyla el que probaría desde fuera de lejos al meta del Fuenlabrada, que con una gran estirada mandaba nuevamente el esférico a la esquina. El Badajoz dominaba el partido y lo traducía en ocasiones.
El Fuenla no conseguía quitarse la presión blanquinegra, lo que continuaba generando acciones peligrosas en favor del Badajoz. En el 23, Soto dispuso de un mano a mano ante Craninx que el meta del club azulón despejó a córner.
A la parroquia pacense se le olvidaron rápidamente las ocasiones desperdiciadas cuando en el minuto 25 Adilson convertía un contragolpe blanquinegro en el primer tanto del partido. El extremo luso llegaba a la frontal del área y con un zurdazo batía al meta fuenlabreño.
El Badajoz se quitaba un peso de encima. Muestra de ello fue la piña que todo el plantel blanquinegro hizo tras el tanto, mostrando a la grada la unión imperante dentro del vestuario para tratar de revertir la situación.
Con el resultado a favor, el Badajoz supo gestionar la ventaja y consiguió tener el balón más tiempo y en mejores condiciones. El equipo de Tenorio continuó llegando y generando acciones peligrosas sin que el Fuenlabrada pudiera evitarlo.
En el minuto 37, Craninx volvía a ganarle la partida a Soto deteniéndole un nuevo mano a mano que evitaba que el Badajoz doblara su ventaja. Solo tres minutos después, el meta belga volvía a mandar a córner un lanzamiento de Cordero desde fuera del área. El Badajoz seguía imponiendo su ritmo en busca del segundo tanto.
Precisamente en el lanzamiento desde la esquina provocado por el chut de Cordero llegaría el segundo gol. Calderón ponía el cuero al centro del área y Mariano Gómez desviaba el cuero dirección portería. Álvaro Barbosa, tratando de despejar, introducía el balón en su portería y ponía el 0-2 en el luminoso.
El Badajoz iba a aprovechar su inercia ganadora para sentenciar el partido antes del descanso gracias a un tanto de Gorka Santamaría. Un fallo en salida de balón del Fuenla generó una perdida de balón en campo propio que el Badajoz no dudó en aprovechar.
Alfaro dirigía el contragolpe con Adilson a su izquierda. El luso recibía la bola dentro del área y chutaba a puerta. Su lanzamiento tocaba en un zaguero kiriko y el balón quedaba muerto en la línea para que Gorka hiciera el tercero.
El Badajoz conseguía ponerle la puntilla al partido antes del descanso. La afición blanquinegra estallaba de júbilo en las gradas animados por el buen hacer de su equipo, que había logrado quitarse una enorme losa de encima.
El encuentro en la segunda parte varió durante los primeros quince minutos, en los que el Fuenlabrada salió más activo y consiguió tener más tiempo el balón en campo rival. A pesar de la mejoría de su rival, el Badajoz se mostró muy solido en defensa y evitó que los acercamientos fuenlabreños fueran a mayores.
Un cabezazo de Gorka y varias acciones de Ferrón, que entró con mucha disposición y ganas de redimirse, fueron las acciones más peligrosas del Badajoz, mientras que el Fuenlabrada apenas logró inquietar a Narváez con varios lanzamientos desde fuera del área.
Con el tiempo añadido finalizado, el colegiado señaló el final de un encuentro que el Badajoz necesitaba para recuperar sensaciones y volver a ser uno con su hinchada. La victoria mantendrá a los blanquinegros en puestos de descenso pase lo que pase en el derbi de La Línea pero los tres puntos son vitales para que el cuadro de Tenorio se mantenga más vivo que nunca en la pelea por la permanencia.
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