Tres cambios por lesión, dos en la primera parte, media hora con un jugador menos, un larguero, un remate impreciso a portería vacía… no fue el mejor partido del Badajoz ante el Algeciras este sábado, correspondiente a la cuarta jornada de Primera Federación en el Cívitas Nuevo Vivero.
El encuentro arrancó con la ausencia de Adilson en el once, entrando Soto en su lugar desde el inicio. Las tímidas llegadas del Algeciras se alternaban con los balones largos de los locales, muy imprecisos en las diferentes facetas del juego con la ausencia, una semana más, de Francis Ferrón como referencia en el ataque.
El juego blanquinegro en la primera parte se volcó por la izquierda, aprovechando la velocidad de Alfaro y los centros de Valcarce, que en el 19’ centró y en la posterior jugada el capitán Zelu no llegó a un pase filtrado.
Antes de la media hora de juego en una imprecisión defensiva local los andaluces realizaron un contragolpe y Mariano despejaba a córner. Jesús Alfaro, por su parte, se convertía en el primer ‘hombre caído’ de la tarde en el bando local, siendo sustituido por Adilson a falta de diez minutos del término de la primera parte.
Justo antes del descanso David Soto se echó al suelo al no poder continuar y el Badajoz llegó al término de la primera parte con diez hombres sobre el césped y el empate inicial en el marcador. Tras la reanudación Burlamaqui ingresaba en el terreno de juego para sustituirle.
En el 53’ la mala suerte siguió persiguiendo a los blanquinegros y Chendri se convertía en el tercer jugador local en no poder seguir, entrando un Mancuso en su lugar que no tardó mucho en volver a los vestuarios ya que en el 63’ vio la roja por una entrada a destiempo en el centro del campo, dejando al equipo con diez jugadores hasta el final del encuentro.
En el 59′ llegó el primer tanto del encuentro con un remate del ex blanquinegro Álvaro Romero, que volvía a Badajoz junto al lateral Tomás, que aprovechó un rechace tras un balón al palo.
Después Javi Ros y Valcarce dejaron su lugar a Müller y José Mas, y anteriormente Adilson buscó el empate al estrellarse con el larguero tras una buena jugada individual dentro del área. Poco fútbol se veía sobre el césped y con el paso de los minutos la tensión crecía entre los dos equipos y la grada pacense enfurecía.
En el 77’ Müller tuvo en sus pies la igualada, como pasara hace una semana en el Cerro del Espino, pero esta vez el remate a portería vacía tras adentrarse en el área se marchó fuera por muy poco en un disparo impreciso, llegando al término del encuentro con la victoria visitante por la mínima por 0-1.