Con 0-1 en el marcador y en el minuto 72 de juego ante el Alcoyano, Óscar Cano decidió sustituir a Tahiru junto a Clemente para dar entrada a Zalu y Gorka Santamaría, un cambio tras el que la afición ovacionó al ghanés tras su gran partido.
El joven jugador salió de inicio por primera vez en lo que va de temporada en el partido correspondiente a la primera eliminatoria de Copa del Rey, destacando desde los primeros instantes como el jugador blanquinegro más desequilibrante.
A la media hora de juego Jilmar remató un centro suyo desde la derecha que acabó en córner y hasta el final de la primera parte tan solo pudieron frenarle con dos entradas que cortaron sendos contragolpes, siendo las dos primeras amarillas del choque.
En la segunda parte el jugador gozó de dos buenas ocasiones para abrir el marcador local, primero con un lanzamiento desde la frontal que se marchó rozando el palo y después con un remate en el área tras un pase desde la izquierda, sin fortuna de cara a gol.
A menos de veinte minutos del final fue sustituido, abandonando el rectángulo de juego por la zona de preferencia con una sonora ovación según avanzaba por la zona de fondo y tribuna hasta llegar al banquillo, siendo reconocido su esfuerzo y buen partido por parte de la afición presente en el Nuevo Vivero.
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