Hoy se cumplen seis meses desde el día 29 de enero, un día histórico para el CD Badajoz, en el que la entidad pacense llegaba a octavos de final tras eliminar a dos rivales de superior categoría como Las Palmas y el Eibar.
El rival de los blanquinegros en esta histórica cita fue el Granada CF de Diego Martínez, que ha sido uno de los equipos revelación de la temporada en LaLiga consiguiendo clasificarse para competición europea por primera vez en su historia.
? Parece que fue ayer, pero hoy se cumplen 6️⃣ meses de esta noche mágica de Copa del Rey.
⚪⚫ Dentro de muy poco volveremos a disfrutar de estos momentos?#AúpaCDB #VamosBada pic.twitter.com/Yih8nIgxWr
— CD Badajoz (@CDBadajoz) July 29, 2020
Aquel emocionante día para la afición blanquinegra hubo un llenazo para la historia en el Nuevo Vivero, que no veía sus gradas a máxima capacidad desde la victoria de la Selección Española ante Liechtenstein por 4-0 el 2 de septiembre de 2006.
El trepidante partido comenzó con el golazo de Álex Martínez en el minuto 1, cuando encajó el balón en la escuadra de la portería blanquinegra. Pronto reaccionó el CD Badajoz con el gol de Pablo Vázquez en el minuto ocho, que celebró con rabia ante su ex equipo.
El resto de partido fue trabado y con pocas ocasiones, con la misma igualdad sobre el terreno de juego que en el marcador. En el minuto 86′ se volvió a adelantar el Granada por medio de Soldado, ante la decepción de la familia blanquinegra.
Pero en el descuento llegó esa última y apoteósica jugada, en la que un córner botado por Álex Corredera fue peinado por Kevin en el primer palo y llegó a la cabeza de Caballero, que acompañado por las ilusiones de los casi 15.000 aficionados que estaban en las gradas empujó el balón a la red nazarí.
Así se llegó a la prórroga, en la que el cansancio hizo mella en ambos equipos, y en cuya segunda parte Carlos Fernández puso el 2-3 definitivo para el Granada. Fue un duro resultado, pero ayudó al Badajoz a conocerse competitivamente contra equipos profesionales de superior nivel, además de afianzar esa relación de amor grada-equipo.