El cuadro verde remontó ante el Calamonte en la cancha rival (26-29)
Tras quedarse a las puertas de la final el año pasado y llegar a la misma hace dos temporadas, la UPB en un año difícil por los numerosos cambios y cuando no entraba en las apuestas de casi nadie, ha conseguido luchar por el título de la segunda división una vez más.
Para llegar a este punto ha sido un camino difícil que se ha ido solventado de la mejor manera posible, con una primera vuelta en la liga regular dubitativa, en la que en la segunda se mejoró considerablemente consiguiendo el pase a semifinales contra Balonmano Calamonte, rival que sólo había perdido un partido en toda la fase regular.
La ida se saldó en tierras pacenses con victoria para Calamonte (22-25) con un resultado que dejaba abierta la eliminatoria. Efectivamente, el conjunto dirigido por Millán Yerga salió al 40×20 de Calamonte como una moto y consiguió un gran parcial de inicio que enseguida igualó e incluso superó el número de goles que había que remontar, para superar la eliminatoria. No obstante la reacción local no se hizo esperar y enseguida consiguieron reducir esa diferencia, llegando al descanso con un más dos para UBP.
Ya en el segundo tiempo, se vio un partido con idas y venidas en el marcador en el que los pacenses nunca llegaron a estar por detrás en el mismo, pero sí igualados en él, hasta que entrados los últimos 10 minutos de partido se consiguió un gran parcial gracias a la buena defensa y al acierto colectivo en ataque que consiguió que se afrontarán los últimos instantes del partido con una ventaja de 5 goles para la Unión.
Todo parecía encaminado hasta que, de repente, una gotera se ganó todo el protagonismo teniendo el partido parado en su fase más decisiva mas de 20 minutos, algo que pudo perjudicar a los verdes ya que podía haber cortado la inercia de buen juegos pero no fue así y pese a que los calamonteños consiguieron acercarse peligrosamente al final
La UBP, arropada en todo su momento por la afición desplazada hasta el partido, consiguió el pase a la final por segnuda vez en tres años, donde se enfrentarán al gran favorito, Tierra de Barros actual campeón y verdugo de los unionistas en la final de hace dos años.
El partido de ida se disputará este fin de semana en Badajoz y la vuelta el fin de semana que viene en Almendralejo. El equipo que consiga la victoria, obtendrá el paso para jugar la fase de ascenso a primera división nacional.
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