El canterano blanquinegro Jaime Herrera debutó con el primer equipo en Mancha Real, compartiendo vestuario con su primo Álex
El parentesco de sangre no suele ser demasiado común en un vestuario. El contrastado futbolista pacense Álex Herrera (26/01/1990) volvía esta temporada al CD Badajoz para intentar devolverlo a Segunda B. Su primo, Jaime Herrera (07/04/1997), continúa en el Badajoz Promesas a las órdenes de Nacho Cortés en esta campaña. El pasado miércoles la Copa federación les unió sobre un terreno de juego.
Álex tuvo así un motivo añadido para disfrutar en Mancha Real. «Siempre es bonito jugar con un familiar y más en este caso con mi primo, que lo llevo siguiendo desde chico. Habíamos jugado muchos partidos en el barrio pero ninguno oficial, así que espero que se pueda volver a repetir», confirma. Los años de juego acumulados por Álex como profesional sirvieron para que Jaime estuviese tranquilo sobre el verde. «Desde el primer momento me sentí muy cómodo por la experiencia que tiene, y esto hace que tengas una mayor seguridad a la hora de dar los pases», destaca el menor de los primos.
Calidad desbordante
Sobre la técnica que atesora su primo, Álex no duda en echarle flores. «Es un futbolista muy muy atrevido y con una calidad técnica impecable, pero aún le falta aprender algo más lo que es el fútbol profesional porque acaba de salir de juveniles», señala. Como era de esperar, Jaime tampoco escatima en elogios. «Sus principales virtudes son la personalidad sobre el campo y la manera en la que controla el tiempo del juego», señala.
El debut de Jaime con el primer equipo es buena prueba del buen trabajo de cantera, algo que el mayor de los Herrera conoce muy de cerca. «Se está entrenando muy bien. Yo llevo también a un equipo y se quiere imponer un mismo estilo de juego para toda la cantera y a medio/largo tiempo se va a ver ese trabajo», confirma Álex.
A pesar de la importante victoria por 1-2 en campo de un Segunda B como el Mancha Real, la Copa Federación sigue sin ser una prioridad. «Nosotros tenemos claro que el objetivo principal es el campeonato y después el ascenso, así que la Copa Federación puede servir perfectamente para que otros chavales tengan la ilusión de jugar con el primer equipo», aclara Álex.
El ilusionante debut dejó muy buenas sensaciones a Jaime Herrera. «Estoy muy contento. Al entrar estuve un poco nervioso, pero luego ya se me pasó. El míster me dijo que estuviese tranquilo porque los rivales no eran mejores que mis compañeros del primer equipo, con los que entreno habitualmente».
Este pasado miércoles en Mancha Real pudo ser el inicio de una gran carrera de la mano. Álex ya ha hecho historia de blanquinegro y a Jaime solo le queda seguir sus pasos.