El solitario tanto de Carreño permite sumar un nuevo triunfo a CD Badajoz frente a un Valdelacalzada que se cerró muy bien
Suman en silencio. A veces ese silencio se rompe para que aparezcan algunas voces escépticas que no terminan de ver con claridad el futuro blanquinegro, pero lo cierto es que aunque a algunos les guste más y a otros menos, este equipo sigue sumando. Esta vez tocó ver como todo un Badajoz no era capaz de rematar a un Valdelacalzada que venía con la vitola de haber sumado un único punto en toda la segunda vuelta. Pese a ello, tres puntos más, y un partido menos.
El portero evita la goleada
En la primera parte, los locales estuvieron como en las semanas anteriores: dinámicos, con hambre, y con cierta facilidad para plantarse ante el marco rival. Las ocasiones se sucedían, el Valdelacalzada no pasaba del centro del campo, y todo parecía indicar que iba a ser una goleada de los pacenses. Germán era el primero en probar con un remate de cabeza la elasticidad de un inspirado Jesús, que evitó sin duda una mayor renta local. Minutos más tarde sería Carreño quién lo haría tras un centro de Pozo.
En plena borrachera ofensiva, una buena triangulación entre Carreño y Jairo, culminaba con otro gran mano a mano que el meta valviense desbarataba con el pie. El gol se veía venir, era cuestión de que pasara un poco más de tiempo, y de que hubiera un poco más de suerte. Los de Toni Iglesias, pese al chaparrón, cumplían en faceta defensiva, aunque se mostraban ofensivamente inoperantes.
Tanto fue el cántaro a la fuente, que finalmente el Badajoz logró anotar el único tanto de partido. En un córner, tras varios rechaces, y una gran intervención de su cancerbero, el balón le quedó suelto a Carreño, para anotar su tanto número 20 en la liga. Tras ese gol, el sevillano tendría la oportunidad de hacer un doblete, pero por enésima vez, Jesús malogró la oportunidad rival con una nueva estirada.
Anodino segundo tiempo
Sobre el segundo tiempo hay bastante poco que contar. El Valdelacalzada comenzó a dar pasitos hacia adelante, mientras el Badajoz levantó el pie del acelerador. Pese a ello, el Badajoz la tendría en las botas de Abraham Pozo, pero nuevamente sería el arquero rival quién desbarataría la acción de los blanquinegros. A partir de ahí, los de Agustín se perderían en el embudo amarillo, y estos poco a poco intentaron creer que era posible arañar algo del Nuevo Vivero. No obstante, no dispondrían prácticamente de ocasiones en todo el partido.
Un mano a mano de Lolo que volvió frustrar el portero visitante sería el preludio a una última oleada del Valdelacalzada que hizo contener la respiración en el coliseo de la capital pacense. Finalmente, todo quedó en conato de ocasión, el encuentro finalizó, y los tres puntos se quedaron en casa.
El Badajoz de Agustín Izquierdo suma 10 de los últimos 12 puntos, y 0 goles en contra en los cuatro partidos de esta racha. No ha sido una jornada en la que finalmente haya podido recortar con los de arriba, ni despegarse del Arroyo, pero los playoff parecen asegurados después de que el Calamonte esté ya con una decena puntos de distancia. El próximo sábado le tocará visitar al Moralo a las 17:00.