Tras conseguir los dos primeros puntos de la temporada, el equipo de Marco Galego intentará conseguir su segunda victoria ante un Amivel que ya vencieron en pretemporada por partida doble.
Tras la alegría de la primera victoria en la primera jornada, y además ante su público, los extremeños buscaran de nuevo en su cancha mejorar su juego. Aunque las sensaciones fueron buenas en el debut liguero se comprobó que el equipo debe mejorar el aspecto defensivo.
Para esta segunda jornada se espera a un combativo Amivel, caracterizado por su lucha constante, que le hace disputar los partidos hasta el último segundo de juego. Uno de los rivales que el Mideba ha podido conocer durante pretemporada ya que hace apenas un mes celebraron un doble partido, ambos acabaron con victoria extremeña.
El equipo malagueño el cual ha incorporado hombres de calidad, como son el exmidebista José Miguel Calderón, o el lituano Karlis Gabranovs, con lo que se puede decir que su plantilla es más que completa, ya que cuenta con jugadores del nivel de José Manuel Vargas, o Jesús Romero.
En la primera jornada cayeron ante Bilbao en su casa, motivo extra de cara a la lucha por el partido, ya que en esta primera fase el no quedarse atrás es esencial para evitar la fase de descenso.
El Mideba con sus hombres ya recuperados tras las diferentes molestias que tenían Abdi Jama y Eusebio, y una notable mejoría de Albert Esteche en sus dedos, podrá contar con la plantilla al completo.
El técnico local, Marco Galego ha señalado estar satisfecho con la evolución del equipo, sobre todo en el aspecto ofensivo, aunque indica que hay que mejorar en defensa, para intentar atajar errores de perdida de pelota o en los bloqueos.
Sin duda los dos puntos en juego serían un auténtico bálsamo de cara al difícil partido que le espera en la tercera jornada donde visitara la cancha de Bilbao, el cual es sin duda uno de los huesos duros del grupo.
Así el próximo partido liguero de baloncesto en silla de ruedas que se disputara en Badajoz tiene todos los alicientes para poder ver un espléndido espectáculo.