
El Gévora cerró el año con un sabor amargo tras caer por 1-3 ante el Montijo en el último partido de 2025. El conjunto que dirige Martín Fernández no pudo poner fin a su mala dinámica y suma ya ocho encuentros consecutivos sin ganar, una racha que le obliga a aprovechar el parón navideño para resetear y buscar soluciones de cara a la segunda vuelta.
El choque arrancó de la mejor manera posible para los verdinegros. Tras un inicio intenso y con personalidad, Adri Maya se estrenó como goleador esta temporada al culminar un desmarque en profundidad con un disparo ajustado al palo largo que adelantó al Gévora en el marcador. El tanto reforzó la confianza local y permitió a los pacenses llegar al descanso con ventaja.
Tras el paso por vestuarios, el guion cambió por completo. Apenas cinco minutos después de la reanudación, el Montijo logró el empate por medio de Edu Reyes, que transformó una pena máxima. A partir de ese momento, el Gévora fue perdiendo solidez, circunstancia que aprovechó el conjunto visitante para dar un paso al frente en busca del triunfo.
Cuando el empate parecía definitivo, Bakary apareció en el minuto 83 para firmar el 1-2 y decantar el encuentro del lado montijano. Ya en los compases finales, Claudio Peralta sentenció el partido con el 1-3, pese a que el Montijo afrontó los últimos minutos con un futbolista menos tras la expulsión de Spinoglio.
Con este resultado, el Gévora se mantiene a un punto de los puestos de descenso y ya piensa en su regreso a la competición, que llegará tras el parón con el duelo ante el Pueblonuevo.





