
El Mideba Extremadura firmó un partido valiente ante el Bidaideak Bilbao, pese a caer por 48–86 en un choque marcado por los problemas técnicos en varias sillas y por una rotación muy limitada que restó opciones a los pacenses. Un encuentro más, el conjunto de Badajoz volvió a toparse con uno de los rivales más duros de la categoría, pero aun así peleó hasta el final pese a la diferencia de fondo de armario.
El partido comenzó igualado, con Solórzano y Rodrigo Pérez asumiendo el peso ofensivo y con un Jairo Lázaro muy activo, generando espacios con su movilidad. También funcionó bien la conexión interior entre Nelson y Rodrigo, clave para sostener al equipo cuando BBK subió el ritmo.
La rotura de las sillas de Joymar y Juan Pablo Escobar obligó a reducir al mínimo las rotaciones, circunstancia que el conjunto bilbaíno aprovechó para abrir brecha. Aun así, el Mideba mantuvo varios tramos de buen control gracias al esfuerzo colectivo. Solórzano (14 puntos), Rodrigo (12) y Jairo (8) fueron los más destacados.
Tras el encuentro, Rodrigo Pérez reconoció la superioridad física del rival, aunque se mostró satisfecho con la actitud del equipo. Por su parte, Álex Carrillo, técnico midebista, lamentó los contratiempos que condicionaron el duelo, pero valoró la unión y el compromiso del grupo.
El Mideba visitará el 13 de diciembre al Rehatrans Getafe (17:00) con el objetivo de volver a la senda de la victoria.





