Tras haber disputado únicamente 24 minutos en las primeras cuatro jornadas de Liga, Javi Galán volvió al once titular de Diego Pablo Simeone para disputar el debut del Atlético de Madrid en la Champions League, nada menos que en Anfield. El cuadro colchonero acabó saliendo derrotado de Liverpool por 3-2 a pesar de completar un ejercicio de resistencia que solo Van Dijk en el descuento pudo desbaratar.
Como era previsible, el Liverpool comenzó dominando durante los primeros compases del choque. El equipo que dirige Arne Slot, uno de los favoritos a ganar Premier y Champions, asestó dos zarpazos al partido antes del minuto 10 por mediación de Robertson y Salah, poniendo las cosas muy cuesta arriba para el Atlético de Madrid.
Cuando el choque estaba cerca de marcharse a vestuarios, Marcos Llorente recortaba distancias y metía al Atleti en el partido, dejándolo más que abierto para los segundos 45 minutos.
Tras el paso por vestuarios, Simeone ajustó a los suyos, dio entrada a Koke para reforzar el centro del campo y consiguió tener más presencia en campo rival. A pesar de ello, el Liverpool transmitía sensación de peligro cada vez que lograba acercarse a la frontal del área de Oblak.
Pudo sentenciar el conjunto red pasada la hora de partido. Tras un robo en campo propio, los hombres de ataque de Arne Slot se lanzaban a la contra, culminando la jugada Salah, que estrellaba su disparo en la madera perdonando el 3-1.
La resistencia del Atleti iba a tener premio en el minuto 81. Una vez más, Llorente remataba de volea un balón llovido en la frontal y su disparo se colaba en la meta de Alisson tras tocar en un defensor. El Atleti igualaba el encuentro a escasos minutos del final.
Pero la crueldad de la Champions se cebaría una vez más con los de Simeone. Con el descuento ya avanzado, Van Dijk le ganaba la posición a Le Normand en un córner y hacía el 3-2 con un gran cabezazo que superaba a Oblak y dejaba la victoria en Anfield.
En lo que respecta a Javi Galán, el lateral pacense firmó una sólida actuación frente a uno de los mejores jugadores del mundo, Mohamed Salah. Aunque el egipcio logró convertir el segundo gol del encuentro, Galán supo minimizar su impacto en el juego. Además, se impuso en seis de los siete duelos disputados, tuvo un 82% de acierto en el pase y no fue regateado en ninguna ocasión. Un rendimiento que, pese al resultado final, reafirma su fiabilidad defensiva y demuestra que está preparado para competir al máximo nivel.
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