
El Tenerife perdió la categoría este fin de semana y jugará la próxima temporada en Primera RFEF. El empate sin goles frente al Racing de Ferrol en la última jornada fue insuficiente para un equipo que no ha conseguido remontar el vuelo en todo el curso.
El conjunto tinerfeño, que llegó a enlazar ocho jornadas sin perder, pagó caro su mal inicio y los constantes cambios en el banquillo. Ni siquiera la llegada de Álvaro Cervera fue suficiente para obrar el milagro. En la última cita del campeonato, los chicharreros tuvieron opciones de llevarse los tres puntos, pero la falta de acierto volvió a condenarlos.
Waldo Rubio, titular indiscutible en la recta final de temporada, cerró el curso con dos goles y cuatro asistencias en 33 partidos. Aunque sus números han mejorado con respecto al año pasado, el extremo pacense no ha alcanzado el rendimiento esperado.
Tras confirmarse el descenso, Waldo utilizó sus redes sociales para lanzar un mensaje a la afición. «He querido dar siempre todo por este club y no ha sido suficiente. Pese a las dificultades de esta temporada solo puedo pediros perdón y daros las gracias de corazón», confesó el futbolista pacense.





