Dos descensos consecutivos. El Badajoz cierra el que probablemente sea el capitulo más negro de su historia bajando a Tercera RFEF, la quinta categoría del fútbol nacional, tras caer por 3-2 ante el San Sebastián de los Reyes en Matapiñonera.
Los blanquinegros comenzaron adelantándose en el marcador en el minuto 15 gracias a un tanto de Ewan, pero se marcharían con empate a uno al descanso después de que Guille Perero lograra en el 33′ el tanto del empate.
Ya en la segunda mitad, un tanto de Grima en propia puerta ponía por delante a los madrileños. Castri conseguiría empatar en el 88′, pero con el partido completamente roto Arasa haría el definitivo 3-2 en el tiempo de alargue.
De esta forma el Badajoz consuma un segundo descenso consecutivo esperado tras una temporada desastrosa en la que en ningún momento se demostró estar capacitado para las expectativas puestas en el equipo. El equipo llega sin opciones a la última jornada liguera en la que se medirá en casa al Llerenense.
Ante la baja confirmada de Borja López, Luis Oliver Sierra decidió salir al césped de Matapiñonera con una defensa compuesta por Grima, Liza, Carlos Cordero y Chacartegui por delante de Miguel Narváez.
En lo que al resto de parcelas respecta, ninguna novedad con respecto al equipo que ganó 1-2 en Montijo. Jou y Petcoff formaron el doble pivote con Sandro Toscano ejerciendo de enganche con Ewan Urain, mientras que Samu Manchón y Adri Carrasco ocuparon los costados.
La puesta en escena del Badajoz no pudo ser mejor. El equipo pacense salió sin complejos y a través de una ordenada presión a la salida de balón del Sanse comenzó a tener mucha presencia en campo rival.
El cuadro madrileño se vio sorprendido por el planteamiento inicial de su rival y tardó en asimilar lo que el Badajoz proponía, cediendo el cuero en el tramo inicial y protegiéndose de las acometidas de los blanquinegros.
Los pupilos de Oliver Sierra lograron encadenar varias llegadas sin excesivo peligro hasta que en el minuto 15 lograrían transformar la primera acción clara de gol. Adri Carrasco lograba ganarle la posición a su par en el costado zurdo, pisaba área y encontraba a Ewan Urain en el punto de penalti, que con un disparo al palo largo hacía el primer gol del encuentro.
El gran inicio de los pacenses se acabó viendo recompensado con un tanto vital de cara a la lucha por la permanencia. El planteamiento inicial sorprendía al Sanse y tenía su premio en el primer cuarto de hora del encuentro.
De forma inconsciente, el tanto a favor hizo que el bloque del Badajoz se fuera retrasando progresivamente, lo que facilitó la mejoría del Sanse. El equipo de Pablo Álvarez se fue adueñando del cuero y comenzó a desplegar su habitual forma de juego.
Las llegadas de los capitalinos fueron sucediéndose y encontraron un filón en la banda izquierda del Badajoz. Cada vez que el Sanse lograba girar el juego conseguía hacer daño a un Badajoz que trataba de defenderse como podía.
La superioridad del conjunto madrileño iba a verse traducida en el marcador cuando el partido superaba la media hora de juego. Guille Perero se aprovechaba de una indecisión de Chacartegui en un balón llovido y enfilaba la meta de Narváez con 20 metros por recorrer. El atacante del Sanse pisaba área y batía al meta pacense con un disparo picado.
El gol espoleó aún más a los hombres de Pablo Álvarez, que siguieron encontrando acciones para adelantarse en el marcador. A pesar de la superioridad de su rival, el Badajoz se mostró contundente para evitar que le llegara el segundo gol en contra.
Uno de los pilares fundamentales para lograrlo fue, de nuevo, Miguel Narváez. El portero dejó una increíble parada a un disparo desde dentro del área de Hugo Esteban minutos antes del descanso que evitaba el tanto del Sanse.
Cuando el partido se encaminaba al descanso, la actuación de Carlos Cordero llegó a su fin. El central almendralejense pidió el cambio debido a molestias en la zona isquiotibial y tuvo que ser sustituido por Dani Cordero, desplazando a Chacartegui al centro de la zaga en la recta final del primer tiempo.
El final de la primera mitad no le pudo venir mejor al Badajoz. El cuadro pacense estaba siendo asediado por su rival y el segundo gol del Sanse podía respirarse en el ambiente. El colegiado decretaba el descanso en un momento delicado para los pacenses en el choque.
Tras el entretiempo, la versión del equipo de Luis Oliver Sierra volvió a ser muy similar a la mostrada en el inicio del choque. El Badajoz se activó nuevamente en la presión y comenzó a llegar por los costados, acumulando efectivos en el área local.
La entrada de Jurgi Oteo por Chacartegui dio más dinamismo al centro del campo blanquinegro. Jou pasó al centro de la zaga y el futbolista vasco acompañó a Damián Petcoff en la sala de máquinas para tratar de tener más posesión.
Cuando el arreón inicial blanquinegro llegó a su fin, el Sanse volvió a ser dueño del partido y comenzó a generar acciones peligrosas gracias a la movilidad de sus hombres ofensivos. Arasa tuvo el segundo gol en sus botas tras un gran pase de Perero que se acabó marchando fuera.
A pesar de las acometidas de su rival, el Badajoz lograba transmitir sensación de peligro cuando conseguía encontrar a Toscano entre líneas. Gracias a una de estas acciones dispuso de una clara acción que pudo suponer un punto de inflexión en el encuentro. Adri Carrasco metía un balón raso al área que acababa llegándole a Fran Grima sin oposición. El lateral definía y su disparo se topaba con las manos de Jagoba.
El propio Grima iba a ser protagonista pero en el plano negativo. El electrónico de Matapiñonera marcaba el minuto 73 cuando un centro desde el costado diestro acababa dentro de la meta pacense tras tocar en el futbolista del Badajoz.
El segundo tanto del Sanse mandaba al Badajoz a Tercera RFEF. El mazazo fue palpable y el equipo mostró síntomas de desconcierto en los primeros instantes tras el gol. A pesar de ello, el cuadro pacense no bajó los brazos en ningún momento y siguió intentando lograr el empate.
Un empate que iba a llegar en el minuto 88 de partido. El Badajoz quemaba las naves y se iba con todo al ataque, logrando hacer el 2-2 por mediación de Castri. El atacante blanquinegro aprovechaba un balón muerto en el área del Sanse para poner las tablas en el luminoso.
A pesar de lograr la igualada, los resultados en el resto de encuentros mantenían al Badajoz en Tercera RFEF. Los pacenses, conscientes de ello, siguieron atacando con todo en busca de un tercer tanto que diera una vida extra de cara a la última jornada.
El partido se rompió por completo ya que el empate tampoco servía para el Sanse. Los centros del campo dejaron de existir y el choque se tornó en un ida y vuelta que hacía prever que no se llegaría a la conclusión con 2-2.
Ya en el descuento, el Badajoz reclamó una pena máxima sobre Samu Manchón después de que el de Almendralejo fuera derribado en el área tras marcharse de dos contrarios. El colegiado no castigó la acción y dejó al conjunto blanquinegro sin opción de adelantarse.
Con el Badajoz volcado en área rival iba a llegar el mazazo definitivo. El Sanse conseguía robar en campo propio y montaba un contragolpe ante un solo efectivo blanquinegro. Arasa se plantaba solo ante Narváez y con mucha calma hacía el 3-2 final que sentenciaba el encuentro y las aspiraciones del Badajoz.
No hubo tiempo para más. El colegiado del choque decretó el final, que a su vez suponía el descenso matemático del Badajoz a Tercera RFEF. El equipo pacense consumaba de esta forma una desastrosa temporada, que acaba con el final esperado pero menos deseado a falta de una jornada por disputarse.
Salvo el espejismo del mes de diciembre, el equipo no ha mostrado la regularidad necesaria para mantener la categoría. La deficiente composición de la plantilla, la inestabilidad institucional y la falta de capacidad y de recursos para revertir situaciones adversas acaban condenando a un equipo que sufre su segundo descenso consecutivo.
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