El Badajoz vuelve a morir en la orilla (1-1)

Los blanquinegros cuajaron una gran primera parte en la que se pusieron por delante pero no le aguantaron las fuerzas para mantener el triunfo ante el Racing de Ferrol

Adilson celebrando su tanto. | JAVIER SUÁREZ

El Badajoz sacó a relucir la calidad de sus mejores futbolistas para superar en el juego a un Racing de Ferrol que presentaba mucha pólvora en ataque, pero los pacenses no pudieron hacerse con los tres puntos.

A pesar de que la inmensa mayoría de ocasiones blanquinegras llegaron desde la banda derecha, el extremo izquierdo, Adilson, pudo celebrar su primer tanto de la temporada.

Esto ocurrió a pesar de las bajas de importancia con las que Óscar Cano contó en la convocatoria. Ni Dani Aquino ni Gorka Pérez pudieron sentarse en el banquillo.

Ante estas ausencias, el técnico granadino decidió formar con Miguel Núñez de central y Joan Truyols en el centro del campo, con extraordinario rendimiento de este último.

Los locales comenzaron el encuentro con el control total del juego, salvando algunas ocasiones aisladas del cuadro ferrolano.

Bastantes acercamientos

La primera que acabó con un disparo de claro peligro la tuvo en sus botas Gorka Santamaría, pero el cuero se marchó desviado.

En el 36′, se unieron los dos principales protagonistas del juego pacense. Se coló Dani Fernández en el área desde la derecha para sacarse un centro de sobresaliente al segundo palo que Adilson convirtió en su primer tanto de la temporada.

Tres minutos antes del descanso, los gallegos disfrutaron de su primer aviso peligroso en el duelo. Pardo tuvo que despejar el balón desde el área pequeña.

Algo similar ocurrió en el primer minuto de la segunda mitad, pero esta vez a favor de los blanquinegros. En el 58′, Adilson estuvo a punto de marcar (también desde el área pequeña) su segundo tanto aprovechando un gran centro desde la derecha de Jesús Clemente.

El tiempo pasaba y los pacenses no cerraban el partido. A falta de 20 minutos, Nathan estuvo bien situado para hacer el tanto de una igualad que ya no se movería del marcador.

Un punto para cada equipo que deja un regusto amargo en el paladar de los más de 8200 blanquinegros que se dieron cita en el Nuevo Vivero. La próxima semana, el Badajoz repetirá día y horario para visitar al Racing de Santander en el Sardinero.

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