La expedición que José Trejo inició hace diez días hacia el lago Baikal ha llegado a su fin. El lunes día 4 de marzo alcanzó el punto más profundo del lago, uno de los objetivos deportivos que se propuso nada más comenzar, convirtiéndose en el primer extremeño en conseguir tal proeza.
Esta expedición forma parte del proyecto Un Extremeño en el Ártico, que comenzó como una manera de comunicar las aventuras de José en esta zona del planeta y ha evolucionado hasta convertirse en un equipo que aspira a visibilizar, mediante desafíos deportivos de alto nivel, la situación en la que se encuentran las zonas polares debido al aumento de la temperatura de la tierra.
Durante la travesía José Trejo se ha encontrado con numerosas dificultades como el mal estado del agua congelada que cubre el lago, debilitada a causa de las altas temperaturas, el mal funcionamiento del material que utilizaba para calentar la comida, las constantes caídas… José deja constancia en su Facebook de los constantes estallidos que se escuchaban bajo el hielo por la noche y cómo la capa se rompe a su paso metiendo la pierna en el lago. También ha tenido que soportar días de fuerte ventisca en los que la sensación térmica se dispara en negativo. Aún no se ha confirmado el día de su regreso a España.
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