Badajoz y Murcia empataron a cero en un encuentro que es el perfecto ejemplo del tópico futbolístico que dice que las defensas superaron a los ataques. Los pacenses gozaron de buenas ocasiones para llevarse el partido, pero unas veces la madera, y otras algún murciano, impidieron que el resultado inicial se rompiera.
El Badajoz mostró cambios naturales en el once con la vuelta de César Morgado al eje de la zaga y con la aparición de Petcoff en detrimento del lesionado Julio Cidoncha. Toni Abad se mantuvo como titularidad pese al regreso de Cristian.
El primer cuarto de hora mostró la cara más ambiciosa de un Murcia que no hizo mucho más a nivel ofensivo. Dani Aquino y Manel pusieron en apuros a la zaga blanquinegra, aunque sin llegar a traducir las llegadas en ocasiones de peligro.
Ocasiones marradas
Los pacenses lograron sacudirse la presión pimentonera y empezar a tomar el timón del encuentro. Los de Patxi Salinas pudieron adelantarse primero por mediación de Mario Gómez que remató a puerta un remate que los visitantes sacaron bajo los palos tras aprovechar un balón que le llegó llovido tras una sucesión de balones llovidos.
Ezequiel Lamarca también pondría el «uy» en la grada tras gozar de una buena ocasión con un disparo que se marchó desviado tras aprovechar un buen servicio de Guzmán Casaseca.
En el minuto 40, se produjo uno de los principales momentos del encuentro. Sergi Maestre pone la plancha sobre José Ángel con una dura entrada y el madrileño Pérez Muley no duda en expulsar de manera inmediata al jugador del Murcia. Sumando los dos minutos de descuento de la primera parte, los cuatro de la segunda, los cinco que aún restaban de tiempo reglamentario de la primera, y los cuarenta y cinco de la segunda, todos ellos juntos sumaban casi una hora de encuentro en la que los visitantes iban a jugar con un efectivo menos.
Justo antes de que se llegara al descanso, el Badajoz tuvo que la probablemente fue la ocasión más clara del partido. Buena acción individual de Guzmán Casaseca, que tras sucesivos dribling sobre los rivales, se perfiló para golpear a puerta y su disparo fue violentamente repelido por el travesaño. Desde la grada se cantó el gol. Fue con esa jugada con la se llegó al descanso. La superioridad en dominio y ocasiones no les bastaba a los de Patxi.
Espesa segunda mitad
Aunque los pacenses comenzaron con buenas oportunidades para hacer gol, poco a poco, los murcianos fueron enfriando el partido, arañando todo el tiempo que podían cuando tenían la posesión a favor. Ferrón la tuvo al minuto de reanudarse el partido, y posteriormente hubo una ocasión múltiple en la que ni el propio Ferrón, ni posteriormente Guzmán pudieron anotar. El lance terminó con un tiro desde fuera de Petcoff que rozó el palo.
Los pacenses lo intentaban también desde la banda. Primero, Eneko Zabaleta puso un centro peligroso que se paseó por el área pequeña sin encontrar rematador. Después, una acción personal de Higón, que había entrado sustituyendo a David Martín, probó la agilidad de un inspirado Mackay.
El Murcia gozaría de dos ocasiones en las que se hizo esencial la aparición de Kike Royo. La primera, de Alfaro, con un disparo que atrapó el meta blanquinegro. La otra, casi al final del partido, con un lanzamiento directo en la que el arquero local se luciría con una gran estirada.
Pese a estas ocasiones, especialmente del bando local, el resultado inicial no se movió. Los pacenses terminan con cuatro puntos en la tabla por cinco de los murcianos. La próxima semana, los de Patxi Salinas visitan Ibiza, mientras que los rojillos se medirán al Recreativo de Huelva en el Nuevo Colombino.