LA PREGUNTA PUÑETERA
Somos parte de una región a la que nos deben mucho prácticamente en todos los sentidos. Además, parece que en los últimos tiempos ha habido ciertos tintes reivindicativos que aluden a una situación de desventaja respecto al resto del país.
He de admitir, que el hecho de que la sede de la final de copa se hiciera oficial hace escasas horas ha trastocado de manera notable el enfoque de esta pregunta puñetera. Pero no se trata en ningún caso de una injusticia, pues la narrativa para un torneo que siempre ha tenido un atractivo especial no queda nada mal que, tras despedir un estadio histórico con una final, den la bienvenida a otro gran coliseo con el encuentro definitivo entre los dos finalistas.
Se marchó el Calderón con este torneo y la siguiente final le brinda un nuevo homenaje a la competición siendo en el escenario que le remplaza.
Al margen de todo esto, creo que Badajoz, sede en dos ocasiones de encuentros de la Selección Española masculina y en una de la femenina, merece seguir siendo un foco de atención más asiduo en todos los aspectos-en el deportivo también, por supuesto-.
Las posibilidades de que se llegara a celebrar tan solemne acto son ciertamente muy remotas, pero quedaría de manifiesto, una vez más, las ganas de la ciudad por hacer cosas grandes y ambiciosas más allá de las minúsculas posibilidades de que se pueda llevar a cabo.
En el candelero existen dos ejemplos bien llevados por equipos locales en los que se pudo ver como el Badajoz aprovechó un supuesto plagio en el cartel del ‘Nuevo Godimento’ de la Juventus o como el Santa Teresa invitó a Luis Suárez a ver su encuentro contra el Betis después de que éste asegurara que el fútbol era “solo para hombres”.
El hecho de que el Nuevo Vivero pueda postularse como una final de copa es sacar una gran publicidad con muy poco. Es catar una difusión multimillonaria con un mínimo esfuerzo procedente de grandes dosis de imaginación y descaro. Para la final de 2019 puede empezar esta candidatura que suena a “nosotros lo decimos para tener difusión, pero si cuela, coló”.
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