El rápido extremo pacense cambia el Mérida AD por su ‘eterno rival’ en la región, el CD Badajoz
«Redoble de tambores». Con una información ya destilada en redes sociales, el presidente del CD Badajoz ya dejaba entrever que su afición iba a descorchar el cava con un gran fichaje. Joaqui ‘el negro’, quién fue desechado hace algunas semanas por el Mérida AD con la llegada de José Miguel Campos, pasa a formar parte de una plantilla que empieza a mostrar sus cartas: bueno, bonito, y de la casa.
Flores posee una más que dilatada experiencia en la categoría de bronce, donde además del Romano, también ha pasado por otros muchos campos. Burgos, Llagostera, Arandina, Alcalá, Toledo, Fuenlabrada o Cerro de Reyes dan buena fe de ello.
En su transitar por la 2ªB, categoría a la que buscará volver de nuevo de la mano de su nuevo equipo, Joaqui ha jugado 248 partidos, con más de 17.000 minutos, y con 22 tantos anotados. Con 32 años, se convierte en el tercer fichaje de la temporada, tras las llegadas de Álex Herrera y Nico Monclova.
Una antigua bestia negra
El Badajocismo temblaba cada vez que Joaqui se enfrentaba a ellos. Tres partidos disputados ante los pacenses saldados con un trío de victorias romanas con papel destacado de Flores. Escoció de sobremanera el del día de Reyes, cuando Joaqui fue uno de los cuchillos que destrozó al equipo que aún dirigía Óscar De Paula en aquel encuentro de Copa Federación de infausto recuerdo para los del Nuevo Vivero.
Pero ahora pasa de verdugo a buque insignia en un proyecto que muestra cada vez más ambición. Capaz de jugar por ambas bandas, de ariete, mediapunta o incluso de lateral, Agustín Izquierdo se lleva un hombre multiusos, del que se espera sea una gran herramienta para lograr el objetivo final del tan ansiado ascenso.
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